Se nos va otro año, se nos va el 2013, e intentaré que con
él se vayan algunos malos momentos mientras me guardo esos otros momentos que
me hicieron del 2013 otro buen año.
Para el 2014 sólo pido que sigan conmigo aquellas personas
que me ayudan a seguir adelante, aquellos que
me hacen pasar momentos divertidos y aquellos otros que consiguen
emocionarme y hacerme vivir momentos emocionantes. Y por qué no dar alguna que
otra oportunidad a aquellos que por algún motivo u otro no estuvieron en mi
vida durante este 2013, o conseguir si de mi depende otra oportunidad con quien
haya cometido algún error, porque al fin y al cabo la vida se vive día a día y
del pasado hay que coger sólo aquello que nos sirva para el siguiente día que
nos toca vivir, ya sea para aprender o tan solo para recordar con cariño algo
que nos saque una linda sonrisa.
No quería entrar en el típico resumen de fin de año, pero es
inevitable echar un vistazo atrás y no mencionar cómo un sueño se iba haciendo
realidad, cómo mi Málaga me iba dando alegría tras alegría en lo deportivo,
cómo nos tuvieron que echar de la máxima competición a nivel de clubes con
errores arbitrales porque con motivos futbolísticos no pudieron, imposible no
derramar alguna lagrimita cada vez que recuerdo aquel partido en Dormund, pero
a estas alturas hay que mirar el lado positivo de las cosas, y que nos quiten
lo bailao, lo vivido con mis comepipas en nuestro templo, nuestras
celebraciones en el centro de Málaga, nuestras cervecitas en la bodeguita… a
todos ellos les deseo lo mejor para el nuevo año y que sigamos abrazándonos
cómo mínimo cada 15 días.
No quiero extenderme más y con esto despido un 2013 de
encuentros, reencuentros y buenos momentos. Feliz salida y entrada de año a los
que os habéis sumado a la aventura de mi vida y a todos aquellos que ya estaban
implicados en ella.
Vuestro amigo,
Alberto Ortiz
No hay comentarios:
Publicar un comentario